Acordaros de la primera guerra mundial, consiguieron aborregar a todos los obreros, mandarlos al matadero a que se desangraran en las trincheras, utilizando la exaltación del sentimiento nacional, mientras que no se hacía caso a las consignas de la internacional que pedía ir todos a una. Cuando todos tenían el mismo tipo de problemas hubieran nacido en Londres, en Berlín o en París. Fue una guerra hecha por el interés capitalista y del mundo financiero a la hora de repartirse el pastel colonial. Acaso os pensaís que en la escalada de exaltación nacionalista no hay perros con diferente collar. No hay fronteras, no hay nacionalidades los desafios en los que esta en juego nuestro futuro nos afectan a todos por igual. Y lo que le pase al vecino nos afecta y salpica de la misma manera. Que pronto se ha lanzado CIU en Catalunya a la organización de referendum, no pretenden otra cosa que lo que pretendieron en su día el gran capital y la banca al estallar la primera guerra mundial. Reclamar su coto privado en los que ejercer su poder.
Solo hay un futuro para la humanidad, la fraternidad y la diversidad en un objetivo común. La igualdad es un invento liberal, que jamás ha sido definido con propiedad. Y que es un ejercicio de narcotización de los anhelos del individuo.
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